Si el blower de un vehículo llega a prenderse al punto de que es necesario apagarlo con un extintor, esto puede indicar un problema grave en el sistema eléctrico o en el motor del ventilador. Algunas posibles causas de esta situación podrían ser:
Cortocircuito: Un cortocircuito en el sistema eléctrico del blower puede hacer que el motor funcione a una velocidad excesiva o que se sobrecaliente. Esto puede generar un aumento de la temperatura y una posible ignición de los componentes internos del motor o del cableado.
Sobrecarga eléctrica: Si el blower está recibiendo más corriente de la que puede manejar, ya sea debido a un problema en el sistema eléctrico o a una falla en el regulador de velocidad, esto podría provocar un aumento en la velocidad del motor y una posible combustión.
Fallo mecánico: Un fallo mecánico en el motor del ventilador, como un rodamiento desgastado o una obstrucción en el sistema de ventilación, puede hacer que el motor funcione de manera anormal y se caliente en exceso, lo que puede llevar a un incendio.
Ante una situación tan peligrosa como esta, es fundamental tomar medidas inmediatas para asegurar la seguridad. Apagar el vehículo y utilizar un extintor es una acción adecuada para controlar el fuego y evitar daños mayores.